martes, 1 de febrero de 2011

LOS MALOS FISCALES, A PROPÓSITO DE LA CORRUPCIÓN Y EL SECUESTRO EN JESÚS MARÍA

Bueno, decir que las resoluciones o la dialéctica de los honorables integrantes del Ministerio Público desdeñan la inteligencia y el sentido común, resulta absolutamente ocioso en estos días de tanto ejercicio abusivo del poder en la República de Achorilandia, hace algo más de dos semanas fuí notificado de una resolución por orden de la Fiscal Titular de la Trigésima Quinta Fiscalía Provincial en lo Penal de Lima, Dra. Nancy Francisca Díaz Chávarri, a quien tenemos a la vista, que ordenaba el archivamiento definito de la denuncia Nº 405-2009, interpuesta contra dos miembros de la Policía Nacional y unos funcionarios de la Municipalidad de Jesús María, por la comisión en mi agravio del delito contra la Libertad -Secuestro Agravado, contra La Administración Pública -Falsedad Genérica-, asociación ilícita para delinquir y pecualdo de uso, asi es mis queridos blogueros, el Ministerio Público como órgano encargado de la persecución del delito, esta vez no lo persegía, lo seguía de lejos, muy de lejos, con la pachocha de un porcino semental y la lentitud gigantesca de una tortuga galápagos.
Como abogado´y desde mis épocas de estudiante , me he preguntado si algún día el Ministerio Público, servirá para algo en Achorilandia, la respuesta que el tiempo me ha dado es realmente patética, con este tipo de Fiscales, con la evaluación de nuestro Consejo de La Magistratura y la ineficacia absoluta de los órganos de control de los actos funcionales, es muy poco lo que se puede esperar y lo peor de todo es que nadie hace, ni quiere hacer nada desde el gobierno.
En el presente caso, tan sorprendente monumento al abuso, que porsupuesto he quejado, se encontraba suscrito, oleado y sacramentado por el tan indecente personaje que tenemos a nuestro costado, aunque sea en foto, como lo es el Dr. José Rubén Ulloa Gavilano, con tan rimbombante cargo de Fiscal Adjunto Provincial Titular de la Trigésima Quinta Fiscalía Penal de Lima, a veces creo que a estos señorones intocables, el sólo aprender lo que son, les hace agotar la última neurona de las pocas que tienen; que ridículos Dios Santo, sólo para ser deletreado o descrito el cargo que ostenta, tienen que ser utilizadas más de sesenta letras de nuestro inmolado y destrozado en mil pedazos idioma castellano.
Sucede que el 26 de junio del año 2009, me encontraba caminando y repartiendo volantes a lo largo y ancho de la cuadra nueve del Jr. Huascar del distrito de Jesús María, barrio en el que si soy algo conocido se debe a mi enfrentamiento cotiadiano con los funcionarios corruptos que el reelecto Alcalde de esa comuna protege y utiliza hasta extremos insospechados, para luego disponer de ellos por la cloaca del desempleo y nombrar a otros que en nombre de su lema gansteril "en Jesús María, la Ley se cumple" siguen amedrentando a indefensos vecinos y comerciantes de dicha localidad. Aproximadamente a las cuatro de la tarde, fuí intervenido en una operación para militar comandada por los más altos "zares" (léase también secuaces) del serenazgo jesusmariano y que contaba con dos esbirros deshonrando el uniforme de nuestra Policía Nacional y que trabajan para el Dr. Ocrospoma; el pretexto de la intervención a todas luces ilegal por la bestialidad y cobardía con la que fuí tratado por aproximadamente veinte mercenarios vestidos de autoridad, era que negaba a identificarme, o sea, nadie me conocía, el mismo razonamiento ha sido tomado por el Fiscal de marras para el archivamiento de esta causa. En el supuesto, que me haya negado a mostrar mi identificación, cosa que no es cierta, esta parte no portaba armas de fuego, tampoco se encontraba bajo los efectos del alcohol o de cualquier droga más alucinante que la estupidez vergonzante de este hecho, no me encontraba conduciendo vehículo alguno, no estaba jugando al fútbol en la calle, no estaba echando agua en carnavales; nada de eso, estaba denunciando la corrupción que campea en Jesús María y este hecho hizo que se me siguiera y rastreara como es su costumbre por aproximadamente media hora.
Lo peor de todo es que el Fiscal a cargo de la investigación, no investigó como mínimamente se debe y no observó detalles cuya función pública obligan a apreciar, veamos: la Fiscalía no se ha encargado de citar, ni de oficiar a la Comisaría y la Municipalidad con relación al otro policía nacional denunciado, ni siquiera se ha dado el trabajo de verificar y leer la Ocurrencia Nº OCC-1823-09, que ha sido redactada de puño y letra por el denunciado PNP Jorge Siapo Moreno, en dicha ocurrencia, él indica que intervino con otro efectivo de la Policía Nacional, sin embargo en su manifestación en la Fiscalía, luego de no haber concurrido a las citaciones efectuadas por la Policía a cargo de la investigación, es decir después de un año, miente cínicamente al decir que fuí intervenido con al apoyo del personal de serenazgo de la Municipalidad de Jesús María y no indica que participó apoyado por otro Policía como lo señala expresamente en la ocurrencia.
No es cierto lo expresado por su Despacho, en la referida resolución, en cuanto señala que ha realizado un análisis exhaustivo de los hechos, por cuanto, tiene por cierto que esta parte no quiso identificarse hecho absolutamente falso, no solamente porque no existiría razón alguna para evadir mi identificación, sino porque ellos me conocen, saben que soy un abogado que denuncia sus tropelías y vecino de la comunidad, que cotidianamente ejerce la defensa de los administrados jesusmarianos que son víctimas, lo reitero una y mil veces de los abusos de los funcionarios de la Municipalidad.
La Fiscalía no tiene en cuenta el caudal probatorio, ni utiliza argumentos razonables. Por ejemplo, si es que solamente me identifiqué en la Comisaría con mi carnet de abogado ¿cómo es que la papeleta de infracción administrativa que me impusieron en ese acto, señala mi domicilio: Av. Cuba Nº 1145, segundo piso, Jesús María?, usted Señor Fiscal, debe saber que los abogados en nuestro carnet no llevamos consignada nuestra dirección domiciliaria, ¿cómo consignaron mi dirección de la Av. Cuba los denunciados, ya que hasta en mi DNI figura como domicilio Izaguirre Nº 347, Rímac?, la razón es muy sencilla, sabían quien era y las fotos que obran en el expediente, demuestran que sus unidades merodean mi oficina de la Av. Cuba con la finalidad de "reglarme", eso es lo que hacen y usted los sabe ¿o no?. Por eso usted, Señor Fiscal, no puede archivar tan grave denuncia, con tan deleznable argumento: que era un desconocido.
Increíblemente, también el Ministerio Público señala, que el actuar de los denunciados “no reviste carácter de doloso”, es decir, conducirme a viva fuerza, secuestrarme, utilizar bienes de estado para perseguir a quienes creen sus enemigos, se encuentra dentro de sus funciones y que “todos los denunciados actuaron de acuerdo a sus atribuciones”. Que yo sepa, la Constitución no ha sido modificada y solamente se puede detener a una persona por mandato judicial o flagrancia en la comisión de un hecho delictivo, y yo no tengo ni requisitoria, ni he cometido delito alguno, la palabra “conducción” no es una institución jurídica, es simplemente una grosera forma de querer ocultar el constreñimiento ilegal del derecho ambulatorio y de la libertad y que sea utilizada como sustento en una resolución Fiscal es un hecho muy reprobable por el gran desconocimiento del derecho.
También llama poderosamente la atención que su Despacho crea que la intervención de la que fuí víctima se encontraba arreglada a ley, si esta resolución se consintiera, crearía un pésimo precedente contra el irrestricto derecho a la libertad, ¿si eran dos Policías y cerca de veinte matones con traje de serenazgo, cómo es posible que me incautaran los volantes y no pudieran registrarme para lograr mi identificación?, no tiene lógica Señor Fiscal.
No sé si está enterado, que los problemas de corrupción en la Municipalidad de Jesús María están llegando a extremos realmente alucinantes, hace un par de semanas un alto funcionario de dicha comuna fué detenido en el acto, lógicamente porque se encontraba en plena comisión de aberrantes hechos delictivos en contra de un adminsitrado que tuvo la valentía de denunciar los abusos que se cometen impunemente; no sé si sabe que hoy por la mañana, la Municipalidad de Jesús María fué a "comprar" en los kioskos todos los ejemplares de Perú 21 y La Primera, porque aparecían algunas cuchipandas de este pequeño y esmirriado alcaldito, de sonrisa de monaguillo y con carita de yo no fuí; no sé si sabe, Doctor Ulloa Gavilano que hoy por la noche una de las noticias más vistas en la televisión, fué que cerca de diez colegas suyos han ingresado a la Municipalidad de Jesús María a investigar toda la corruptela y podredumbre que apesta en esa dependencia estatal. ¿lo sabe?, usted dirá que no sabe y yo diré que usted no sabe nada de derecho, y además es un indolente, porque yo me he entrevistado en su Despacho dos veces con usted y le he dicho personalmente que como abogado defensor repudio el amedrentamiento, le he explicado personalmente cómo fuí secuestrado y vejado delante de los vecinos, le he dicho que oficie a la Policía y a la Municipalidad para que identifiquen al otro policía secuestrador, le he mencionado que antes que Fiscal es usted un colega mío y si a los abogados le hacen esto, que será de los vecinos indefensos; que verguenza y que asco que sea mi colega, es usted un patán, porque me trató como un patán y piensa como un patán, es decir no piensa, es un digno Fiscal de la ciudad de Achoridópolis, un achoradazo, porque usted cree que este atropello quedará impune, pero no será así, daré pelea, mi vida cotidiana es defender a mis clientes de abusivos como usted, como algunos alcaldes y su corruptos funcionarios, con la premisa siempre que otorongo no come otorongo.
Los dejo por ahora, mis hipócritas lectores, no sin antes decirles que daré pelea para que estos abusos no vuelvan a suceder, la imcompetencia y la corrupción son plagas de muy mala entraña y afectan a nuestra sociedad, que siempre debe estar alerta para rechazar estos actos que provocan verguenza ajena.
Me indicaron que mi queja ha sido derivada a la Fiscalía Anticorrupción, muy de moda en estos febreros que nos matan de calor y de indiferencia, suerte a todos y gracias por su solidaridad.


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